Insisto en esto, me lo repito una y otra vez y no me canso.
Es necesario volver a ciertas prácticas, tenemos cada vez más información y acceso a ella pero poco conocimiento de nosotras mismas, mucha ansiedad y poca paciencia de nuestros propios procesos.
Los modelos socio - sexuales a lo largo de la historia se han transformado, los roles, las responsabilidades y el lugar que ocupamos las mujeres.
Pero aún así la presión que llevamos es inmensa.
Ser buenas en todo y al mismo tiempo no tener energía para nada.
Un ideal de belleza que es imposible alcanzar y que en mayor o menor media corremos detrás.
La lucha por quitarnos ese maquillaje irreal cuesta y muchas veces duele mucho.
No hay espacio para la escucha, para ver si eso que soy es real o impuesto.
No hay tiempo para revisar la nueva versión que somos hoy.
Solo el tiempo corre y el llegar a todo es agotador.
Buenas madres, buenas amantes, profesionales, amigas, buenas en todo.
Eso se espera.
Y en el último suspiro del día me dejo un pedacito de tiempo para hacer ese pequeño ejercicio que tanto me gusta y bien me hace.
Volver, volver a sentirme respirar, ese aire con placer, recorrer mi cuerpo con los ojos cerrados y reconocerme.
Volver a mover mi energía, a dejar ir eso que me encierra.
Que te regales tiempo, que te regales escucha, que te sientas y te puedas suavizar ahí donde sientes que es.
Recuperar prácticas de conexión femenina, para moverte, liberar el cuerpo, conectar con tu centro de poder (tu útero) y que puedas ni más ni menos que encontrarte.
Conecta con tu Diosa!

Comments